Son muchos los niños que llegan cada semana a la consulta externa del Dr. Jorge Santana Álvarez. Esto sucede todos los lunes a las nueve de la mañana en el hospital militar clínico quirúrgico docente Dr. Octavio de la Concepción y de la Pedraja, de esta ciudad, allí tiene habilitada la consulta de otorrinolaringología destinada a la pediatría.
En esa consulta multidisciplinaria, el Doctor en Ciencias Médicas, Profesor Titular y Consultante, Investigador Titular, y especialista de Segundo Grado en Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello, atiende a pequeños procedentes desde Guantánamo hasta Sancti Spíritus, y para aquellos que requieren de ser intervenidos quirúrgicamente, los opera los terceros viernes de cada mes, en el hospital pediátrico provincial Eduardo Agramonte Piña .
Como rutina pasan por sus manos, aparte de los adultos, niños que son operados de tumores del cuello y nasofaríngeos, de oído, de parótida, vías lagrimales y tráquea.
“Las afecciones dentro del oído son muy complejas, y no incluye solo las crónicas del oído medio, sino también la cirugía funcional y reparadora de las estructuras del oído medio, la que una vez realizada mejora la audición, evita las complicaciones y las molestias provocadas por la supuración crónica”.
Así dijo el Profesor Santana antes de comenzar una cirugía en una niña camagüeyana que padecía de un tumor de la glándula parótida (parotidectomía subtotal), para respe
tar el nervio facial que transcurre a través de la mencionada glándula.
Igual operaría otro caso de tímpanoplastia en otra infante con otitis media crónica supurada, a lo que añadió: “Después de garantizar la ausencia de secreción del oído medio, se requiere reparar la membrana timpánica para favorecer la audición y su calidad de vida, de manera que pueda comportarse como cualquier niño, hasta bañarse en piscinas”.
Al adentrarnos en las causas de la supuración de los oídos en los niños, el Dr. Santana se refirió a la mala neumatización del hueso temporal, y aclaró que el sistema neumático comienza a desarrollarse en el período embrionario, o sea, que hay riesgo de padecerlo desde el nacimiento, a lo que agregó que la perforación timpánica también sucede ante un trauma.
Concluida la operación, suturaba la herida por la residente en Otorrinolaringología Dra. Erika Romero Romero, de República Dominicana.
Aparte de que el cirujano principal es el Dr. Santana, él recalca que tiene un equipo que lo apoya. En esta ocasión, estuvieron las doctoras Luz Gregorich Torres y Ana Morikawa Álvarez, especialistas en Otorrinolaringología; las residentes Erika Romero Romero, de República Dominicana y Ana María Fernández Rivas; el anestesiólogo y reanimador principal Dr. José Villena Suárez, con su equipo integrado por: los residentes doctores Lilian González Bermejo, Pedro P. Moreno Caballero y Enisleydi Esquivel García; y la licenciada en Enfermería Norys Rivero Abdala.
Para este equipo la intervención quirúrgica, como ocurre en todas, devino clase magistral. Cada corte, cada detalle era explicado por el Profesor, quien emana conocimientos que aporta y comparte, por supuesto, como una manera de preparar a otras generaciones.
A no dudar, hombres como el Profesor Santana Álvarez, ofrenda con sus saberes a mantener la salud de la niñez y en lograr un desarrollo adecuado en la primera infancia, que incluye el aspecto emocional, social y físico. Un menor que oiga bien o se le mejore su calidad de vida en este sentido, tendrá un desenvolvimiento general con un impacto favorable, sin obviar que será el adulto del mañana.
Esa es una de las razones por las cuales Cuba invierte en el sector de la Salud Pública de manera gratuita para todos, con especial énfasis en lo concerniente al Programa de Atención Materno Infantil (PAMI), vinculado con adolescentes de ambos sexos, mujeres en edad reproductiva y niños de todas las edades.
Fuente: Tomado de Cubadebate