Por la severa limitación que representa la Retinosis Pigmentaria para quienes la padecen, el centro provincial para atender esa enfermedad en Guantánamo implementa medidas de bioseguridad desde que se decretó la COVID_19 en el país a favor de garantizar ese servicio de salud.
Entre ellas destacan el uso del nasobuco o máscara por parte de los trabajadores y pacientes, el lavado de las manos con agua clorada u otra solución para desinfectar y la estricta higiene de los dormitorios y otros locales disponibles para quienes ingresan dos veces al año por 15 días como establece el protocolo de atención a esos enfermos.
La Licenciada Maray Basulto Lias, Jefa de sala de los servicios de enfermería en centro ubicado en la ciudad capital aseguró que se mantienen ambientados los locales para aplicar ozonoterapias y vitaminas indispensables para contrarrestar los efectos de ese padecimiento hereditario el cual provoca la pérdida progresiva del campo visual además de ceguera nocturna o lenta capacidad para adaptarse a la oscuridad.
Agregó que los pacientes de la provincia que están en estudio relacionados con la Retinosis Pigmentaria también reciben consultas especializadas martes y viernes para confirmar o no el diagnóstico, se les analizan el estado de la visión y del campo visual, además de conocer los antecedentes de otras enfermedades oculares ,lo cual permitirá el tratamiento oportuno y de ser necesario someterse a una intervención quirúrgica.
Fuente: Radio Guantánamo