A una semana del inicio de la vacunación antigripal a la población pediátrica en Guantánamo, casi nueve mil niños recibieron el inmunógeno de los 13 mil 321 previstos a proteger contra la influenza estacional del hemisferio sur, causada por virus circulantes como el H3N1 y algunos tipos de influenza.
La doctora María Elena Sánchez García, responsable del programa de vacunación en la provincia, explicó que se aplican dos dosis, con un intervalo de cuatro semanas, a los niños de entre los seis meses y el año, 11 meses y 29 días.
Mientras, se aplicará una sola dosis a los menores de dos a cinco años de edad con asma bronquial o que no padezcan de esa enfermedad, pero sí presenten otros factores de riesgo como parálisis cerebral infantil, fibrosis quística, diabetes mellitus, insuficiencia renal…
El equipo básico de salud tiene la responsabilidad de informar a las familias, pero en caso de no pasar, esta puede acudir a los vacunatorios con su niño, que se someterá a un chequeo previo antes de inocular el inmunógeno por medio de una inyección.
La antigripal se clasificada como una vacuna inactivada o muerta y, por lo general, no se notifican reacciones adversas de gran magnitud ni de manera frecuente, aunque según los previsto en el programa nacional se cumplirá la vigilancia por una hora tras la inoculación.
Sánchez García precisó que tras la etapa de vacunación pediátrica, comenzará la inmunización de los adultos, teniendo en cuenta varios factores de riesgo, dados por enfermedades de base, condiciones como el embarazo y puestos laborales expuestos.
La inmunización contra la gripe en el país se realiza dos veces al año y comenzó en los noventa con la idea de proteger a los grupos de riesgo ante formas graves de la influenza estacional, con vacunas que se confeccionan a partir de la vigilancia sobre los virus circulantes en nuestra área geográfica.
Tomado de: Venceremos
